Un tratamiento seguro y preciso para suavizar líneas de expresión, refrescar tu mirada y devolverle descanso a tu rostro sin cambiar quién sos.
La toxina botulínica es un tratamiento médico que actúa relajando de forma selectiva los músculos que generan arrugas dinámicas. Su aplicación es rápida, precisa y prácticamente indolora. Permite suavizar líneas en frente, entrecejo y patas de gallo, manteniendo siempre un resultado natural y armónico.
Lográs una expresión descansada sin perder tu gestualidad.
Se notan a los pocos días y se integran de forma armónica al rostro
En pocos minutos podés retomar tu rutina habitual.
Reduce el esfuerzo muscular y ayuda a mantener la piel más lisa a largo plazo
La toxina botulínica es ideal para trabajar áreas del rostro donde las arrugas aparecen por la expresión cotidiana. Elegimos cada punto de aplicación respetando tu propia anatomía y lo que te hace única.
La aplicación es muy rápida y casi indolora. Podés sentir una pequeña molestia por segundos, pero suele ser perfectamente tolerable.
Generalmente entre 4 y 6 meses, dependiendo de tu gesticulación, estilo de vida y plan de tratamiento.
No. Trabajo con técnicas de precisión que relajan sin congelar, respetando tu identidad facial.
Sí. El procedimiento no requiere tiempo de recuperación. Solo recomendamos evitar ejercicio intenso y masajes faciales durante las primeras horas.
